¿La educación nos hace libre o nos hace esclavos?
- Editor de la Revista IS
- 3 ago 2018
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 20 nov 2018
Liliana Castillo Zeballos.
SIC 112-681

“El educador es el hombre que hace que las cosas difíciles parezcan fáciles”
Ralph Waldo Emerson
Una cuestión de hegemonía cultural
Desde pequeña me ha llamado la atención observar el comportamiento de la gente, padres, profesores, familiares, amistades, adultos y niños en general. He visto que no siempre hay coherencia entre lo que dicen y expresan. Vi también que había contradicción cuando decían que ser feliz era lo más importante, cuando lo único que hacían era trabajar en algo que paradójicamente no les hacía felices. No tenían tampoco ninguna esperanza de poder serlo, porque ese trabajo no les generaba mucho recurso, y había que estar agradecido porque les daba de comer. Entonces felicidad rondaba en torno a la solvencia económica, más allá de trabajar en pro de un sueño. Esto de pequeña me atormentaba, me preguntaba cómo es que alguien podría trabajar toda su vida en algo que detestara, volviéndose un esclavo de la rutina diaria. Pienso y cuestiono el cómo se llega al punto de caer en una rueda automática, delimitada por patrones sociales en relación con el desarrollo personal, sigo cuestionándome si es lo correctos.
Me temo que nuestro modelo socioeducativo, perpetua ese mismo comportamiento a través de una educación que no busca la libertad en torno a la realización del ser, si no, más bien a la capacitación de seres no pensantes que sigan manteniendo los paradigmas ya establecidos.
Me preguntaba, teniendo unos 7 años, por qué los profesores temían al director de la escuela. Por qué lo saludaban con cordialidad y sonreían cuando realmente lo que querían era que se fuera: ¿Era el caso que todos los profesores mentían? entonces ¿Por qué me exigían ser sincera y respetuosa a mí y a mis compañeritos? .También me pregunté cómo era que mi abuela su educación y su tiempo, teniendo solo segundo básico había aprendido a ser mamá, a cocinar, a sumar y restar, hacer las compras, a viajar en micro y todo lo que hace un adulto. Ya que por otro lado me decían que la escuela y el estudio lo eran todo, que sin estudios no se podía ser nadie en la vida ni menos aprender cosas.
Desde una cuestión vivencia la autora recorre la historia de la educación y el poder con el fin de poder entregar antecedentes en la reflexión critica sobre como la educación se a transformado en un mecanismo de poder de la clase dominante, mediante una lectura cercana la autora nos invita a re pensar la educación. Si quiere profundizar en el ensayo puede encontrarlo en nuestra primera edición dedicada al ensayo social critico.
La pagina aun se encuentra en construcción, pronto estaremos publicando y debatiendo el devenir social y la reflexión académico-critica.